La Comuna/ Por José Ángel Solorio Martínez

Opinión

Llegó Arnulfo

El nuevo dirigente de la Sección XXX del SNTE, Arnulfo Rodríguez Treviño, trazó en el evento en el cual ayer martes, el enviado del CEN de esa agrupación le tomó protesta, frente al gobernador, Américo Villarreal Anaya, lo que será su gestión al frente del sindicato más poderoso de Tamaulipas: trabajar por la educación, colaborar con el Ejecutivo estatal, y sumarse al proyecto educativo del presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien le reconoció su labor en la construcción de un nuevo proyecto educativo y de entregar a los profesores el derecho a elegir en forma democrática a sus dirigentes.

Tarde completa para Arnulfo.

Vitoreado por más de mil docentes que le reconocieron su trayectoria pasada y presente, ante los cuales protestó como dirigentes, y luego de un encuentro con más de dos mil educadores de todo el estado, el oriundo de Villagrán, tuvo gestos de magnanimidad con los dirigentes que le antecedieron a pesar de las sonoras rechiflas que se llevaron, de un enardecido grupo magisterial que se le entregó.

Externó, con fina diplomacia, su postura ante Villarreal Anaya.

Sin intermediarios, sin recaderos, le dijo que los maestros son agradecidos y recíprocos:

“Sí usted nos da veinte, nosotros le regresamos ochenta; si nos da cincuenta, le regresamos cien.”

De igual manera, elogió al presidente AMLO, al comentar que él, puso en la Secretaría de Educación Pública de la nación, a gente que conocía el tema educativo del país. “Creo, en todos los estados, debería ser así”, deslizó sin ambages.

Rodríguez Treviño, en un improvisado discurso que estuvo plagado de anécdotas y de experiencias vividas en su larga trayectoria sindical y política, recriminó al ex dirigente Rigoberto Guevara, su actitud en el proceso eleccionario toda vez que intentó imponer como su sucesor a Abelardo Ibarra.

“Te recuerdo que por este grupo que está aquí, ganaste”.

Fue un latigazo, que enrojeció el rostro del ahora ex dirigente.

Abucheos y rechiflas para Rigo.

Porras para Arnulfo y gritos de ¡fuera! ¡fuera!, para el profe Guevara.

El nuevo líder de la Sección XXX, intentaba calmar a la audiencia que se llevó parejo con gritos de desaprobación a algunos acompañantes del Gobernador a quienes acusan de haber instigado la división en el gremio magisterial al pretender torcer la elección.

“Take it easy”, decía desde el estrado.

En el contexto de su mensaje, recordó a Villarreal Anaya, el lejano día cuando desde Nuevo Laredo, vino al frente de cien obreros, cien campesinos y cien profesores –por órdenes del dirigente obrero Pedro Pérez Ibarra– a ciudad Victoria, a destapar como candidato a gobernador al ingeniero Américo Villarreal Guerra.

“Decían que estaba viejo; decían que no iba a ganar. Y aquí estoy. Sí se pudo”, expuso ante un conglomerado que se le entregó como hace diez años cuando venció al candidato de Elba Esther Gordillo. “Trabajaré, para que al sindicato, se le dé el trato que le corresponde.”

Villarreal Anaya, aseguró que trabajará con los profesores tamaulipecos; expresó, que tendrán un amigo en él; y anunció, lo que esperaba ansiosamente el magisterio tamaulipeco: tendrán aguinaldo en tiempo, este mes de diciembre.

Arnulfo y los profesores, visualizaron la intervención del gobernador como la mano tendida para iniciar una transparente y saludable relación entre Sindicato y Gobierno.

Atestiguaron el acto, diputados locales de todos los partidos, alcaldes e integrantes del Gabinete de AVA.

La era de Arnulfo, ha iniciado con los mejores augurios.