Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- El ex trabajador petrolero Carlos Ibarra Pérez, miembro de una familia muy prolífica y conocida en esta ciudad, falleció la noche de este jueves causando hoy una gran consternación.
Complicaciones médicas derivadas de COVID 19, llevaron al deceso del fundador del Grupo Unificador Mayoritario (GUM) de la Sección 36 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, que en su tiempo combatió contra el cacicazgo de Joaquín Hernández Galicia (+) y a nivel local contra Ernesto “El Gato” Cerda, Ramírez (+).
Por esa proclividad a participar en la problemática de su gremio fue jubilado con todas sus prestaciones antes de cumplir la edad laboral, por lo cual siguió luchando hasta convertirse en vice Presidente del Movimiento Nacional Petrolero, cargo que hasta la fecha ocupaba al lado de Hebraicaz Vázquez Gutiérrez.
En Reynosa en el año 1983, fue candidato a la Presidencia Municipal de Reynosa, postulado por el Partido Mexicano de los Trabajadores, compitiendo contra el licenciado Miguel Valdez Revilla.
Luego de esa experiencia se integró al Partido Revolucionario Institucional, partido en el que militó hasta hace dos años en que se disgustó con el doctor Serapio Cantú Barragán, porque no le cedió un espacio en su planilla como regidor, puesto al que aspiró durante mucho tiempo para ayudar en el litigio de diversos problemas sociales.
En los últimos meses se activó al equipo del diputado local del PAN, Gerardo peña Flores, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado.
Carlos Ibarra Pérez, fue más conocido por participar en una serie de manifestaciones entre los años 1990-2000, como presidente del Comité Popular de Defensa Ciudadana, con el que litigó diversos asuntos relacionados a invasión de predios ejidales, siempre en favor de las causas vulnerables.
En los 90´s, participo en el conflicto del transporte al lado del grupo del desaparecido dirigente Manuel Suero López.
Muy dado a dar opiniones sobre asuntos nacionales e internacionales, se recuerda un capítulo interesante de su existencia cuando se convirtió en una de las personas “más buscadas del mundo”, dado a que hizo una declaración que fue maximizada en torno a que pagaría 10 mil dólares por la cabeza de cada policía de migración norteamericana, un hecho que fue difundido y tomó trascendencia internacional a través de las páginas de El Montinor de McAllen, con el reportero Leonardo Vázquez (+)
Siempre polémico y participativo se hizo cargo en los últimos años del despacho de abogados que tenía su hermano el abogado Luciano Ibarra Pérez (+) en la colonia Longoria y aunque él mismo aclaraba que no tenía la cédula profesional litigó y triunfó en la mayoría de los casos que representó.
Algunos de sus más allegados le llamaron “El Guerrillero Urbano”, justo homenaje a un hombre que a pesar de sus más de 83 años de edad que cumplió el día 22 de marzo, se mantenía muy dinámico y jovial como se le habrá de recordar.
El activista social tenía muchas frases que solía utilizar en sus reuniones de amigos una de ellas era, “Estamos condenados al triunfo y sentenciados a servir al pueblo” y “Que viva la delincuencia y la degradación y el vicio, sino de que viviremos los abogados”.
Una de sus últimas apariciones públicas fue durante la manifestación que organizó en el 10 de marzo anterior el activista social, Marcelo Olán Mendoza en defensa de los derechos de las damas con motivo del “Día Internacional de la Mujer”, ahí ya se le veía un poco demacrado y con un profundo derrame en un ojo.
La sobrevive su esposa Margarita Virrueta de Ibarra: hijos Margarita, Martha Miriam, Ricardo, Carlos, Víctor Hugo, Marisol y Melissa Ibarra Virrueta.
Su cuerpo será cremado hoy mismo. Descanse en paz, Don Carlos Ibarra Pérez.
