Por Oscar Díaz Salazar
Toma de protesta con sabor a arranque de campaña fue la que atestiguamos este martes 30 de septiembre en el Polyforum de Ciudad Victoria, escenario de la sesión solemne del Congreso del Estado de Tamaulipas, en la que tomaron protesta los magistrados y los jueces del Poder Judicial recién renovado por el mandato de los electores.
Los titulares (ejecutivo) y representantes (legislativo y judicial) de los tres poderes, se dieron cita para tomar protesta y atestiguar la asunción de la magistrada Tania Contreras, que a partir del día siguiente, cambiará el estatus de electa, por el de presidenta, sin más adjetivos, del Poder Judicial del Estado.
El Polyforum completamente lleno, incluso rebasado en su capacidad, declarado recinto oficial del Congreso del Estado, fue el escenario donde formalmente se llevó a cabo una sesión solemne de Congreso para tomar protesta de los nuevos integrantes del Poder Judicial, pero también fue el escenario, desde otra perspectiva, del arranque de campaña de la abogada Tania Contreras en pos de la gubernatura de Tamaulipas, y si me apuran un poquito más, fue también sitio de otro destape, el del diputado Humberto Prieto, que puede ser la opción del humanismo para Reynosa, y que vive y disfruta de las altas responsabilidades que le han confiado.
El diputado Humberto Prieto, de acuerdo a lo que vi en la sesión solemne, es un político que ha crecido con los retos, que a madurado rápido y bien, que ha sabido estar y adaptarse a las circunstancias. Y el elogio no es gratuito, lo digo porque la sesión tuvo muchos aspectos positivos, fue puntual, ágil, bien llevada, combinando perfectamente lo que se requiere para dar validez a la sesión, la liturgia cívica, los protocolos y sin descuidar los mensajes políticos para el público presente.
Para el público de mi pueblo, de Reynosa, fue una verdadera revelación y una grata sorpresa, el excelente manejo que tuvo Humberto Prieto en su carácter de presidente de la Junta de Gobierno y presidente del Congreso. Con fluidez y profesionalismo, Prieto presidió los trabajos del Congreso, fungió a ratos como maestro de ceremonias y tuvo una destacada intervención expresando el posicionamiento del Congreso en relación al asunto que los convocó, que fue la renovación de los integrantes del Poder Judicial.
El único “detalle” y riesgo para Prieto, es que se puedan sentir incómodos con su éxito, sus pares, los titulares de los otros poderes del Estado, que estuvieron bien en sus intervenciones, pero no tan bien como el diputado Humberto Prieto Herrera.
