Por Oscar Díaz Salazar
Circula la versión de que veinte millones de argumentos, y en inglés, fueron remitidos al súper policía de la Cuatrote, para dejar atrás, en el olvido, el asunto del patio de resguardo de auto tanques (pipas) ubicado en una colonia escondida de Reynosa.
Una producción masiva de videos de manufactura profesional y de larga duración, exaltando a Súper Jarfuch, es lo único que ha quedado, de la desaparición de los músicos de Reynosa.
Permanece impune y sin conocerse las causas, móviles, y la identidad de los autores del asesinato del delegado de la Fiscalía General de la República en el bulevar más importante de Reynosa, a plena luz de día, y en una forma que debería causarnos muchísima indignación, tristeza y miedo.
Si juzgamos la totalidad, por lo que vemos en una parte, tendremos que dudar de la efectividad, honestidad y profesionalismo del secretario de seguridad ciudadana del gobierno federal, Omar García Harfuch.
La difusión de muchísimos audiovisuales en los que se presume, sin probar, que Súper Jarfuch resolvió el caso de los músicos y ordenó la ejecución de operativos policiacos exitosos que culminaron con la detención de integrantes del crimen organizado, traficantes de drogas, guachicoleros, gatilleros, terroristas y otras delincuentes, sin mostrar a los detenidos, armas aseguradas, órdenes de aprehensión, mercancías decomisadas o pruebas de lo que se afirma en los videos propagandísticos, nos hace pensar que las historias narradas (sin contar con las pruebas de lo que se afirma) sirven para fortalecer la imagen de súper policía del señor Harfuch, pero son falsas, y qué tal vez las crean y den por buenas en el resto del país.
Y si lo que podemos constatar es que mienten en lo que a Reynosa se refiere, pues lo lógico es pensar que también son mentiras lo que nos dicen de otras regiones, estados y municipios.
A juzgar por los tres asuntos mas recientes de Reynosa, resulta que Super Jarfuch es el héroe del segundo piso, un héroe con súper poderes, un héroe de ficción, de mentiritas, o mentirotas.
