EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.—Nuevamente Hutchinson Transferencia de Fluidos de México, S.A. de C.V., se ve inmersa en actos de corrupción, al amparo de instancias laborales que intentan torcer la justicia, violando los derechos de empleados mexicanos.
Lo anterior trascendió hoy cuando la ex empleada de confianza de la mencionada maquila de capital francés, de nombre Claudia Patricia Castro Hernández, acudió ante la Unidad de Investigación No. 3 de la Fiscalía General de Justicia del Estado, para ratificar su querella en contra de la citada empresa, acusándola de alterar su expediente laboral para anular, evitar o al menos retrasarle el pago de su demanda laboral por despido, que ya ganó después de un tortuoso juicio en la instancia correspondiente.
Para lograr su cometido que viola flagrantemente los derechos laborales de la demandante, la representación jurídica de Hutchinson, que se ubica en el Parque Industrial del Norte, logró confabularse con personal de la Junta Especial de Conciliación No. 4, que sustrajo pruebas del expediente, aplazó audiencias, omitió notificaciones e incurrió una serie de maniobras delincuenciales que hablan del grave contubernio entre la parte demandada y la supuesta autoridad legal para sancionar estos conflictos.
La demandante Claudia Patricia, justamente muy molesta por estas maniobras está requiriendo el apoyo de la FGJE, toda vez que no puede ser posible que se den estos actos de deshonestidad, máxime cuando se trata de una fábrica reincidente que llega a sustraer la miel del trabajo de la mano de obra local.
Hutchinson en sus diversas filiales, se ha visto muy cuestionada en los últimos años por sus trabajadores, a quienes les ha cometido una serie de atropellos que van desde los despidos injustificados, hasta la omisión de pagos de aguinaldos y reparto de utilidades, que año con año reportan en ceros, hurtando el fruto del trabajo de sus obreros y de paso incurriendo en fraude ante las autoridades tributarias.
Llama profundamente la atención este enésimo caso, más aún por la actuación de empleados de la Junta Especial No. IV de Conciliación que se supone son los intermediarios para lograr otorgar a ambas partes lo que en justicia les corresponde, pero que hoy, evidentemente, se encuentran amafiados, lo que marcará más a ambas partes de proceder la querella pidiendo justicia, ahora en el terreno judicial, con todas las pruebas que la afectada ha presentado.
La ratificación, reclama también una investigación de parte de los jefes del Centro de Conciliación Laboral del Estado de Tamaulipas, pues en las juntas especiales, aprovechándose de la privacidad y secrecía que deben existir en el manejo de demandas laborales hacen arreglos en lo oscurito y por debajo de la mesa, que no es la primera ocasión que ocurren, siempre en favor de patrones adinerados que a través de tinterillos corruptos fallan contra los más humildes que por tanto deben ser consignados y suspendidos o cesados de sus cargos.
